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TRANSPORTE • OPINIÓN • 25 de noviembre de 2025
Menorca: ¿Modernización de autobuses o control para recaudar más fondos?
Autobuses "inteligentes" en Menorca: ¿progreso o pretexto para vigilancia y subidas de tarifas?
El Consorcio de Transporte de Mallorca (CTM) anuncia una inversión de 1,8 millones de euros para adaptar la tecnología de pago en Menorca y 2,2 millones más para equipar los autobuses con sistemas avanzados. Fondos provenientes del factor de insularidad y ayudas europeas. La pregunta ineludible es: ¿se trata de una verdadera modernización al servicio de los ciudadanos, o de una maniobra para justificar subidas de tarifas y aumentar el control sobre los movimientos de la población?
En un contexto de concesión caducada hasta 2026, estas "mejoras" podrían ser el preludio de un nuevo modelo de negocio que prioriza los ingresos sobre el servicio público.
Inversión millonaria: ¿beneficio real o excusa para más cargas?
La adaptación tecnológica en Menorca incluye la implantación del Account-Based Ticketing (ABT), un sistema que permite pagos con tarjeta, móvil o QR, vinculando cada trayecto a un perfil digital del usuario. En teoría, ofrece comodidad y eficiencia. En la práctica, implica un registro exhaustivo de movimientos: hora, ruta, frecuencia y patrones de desplazamiento. ¿Quién accede a estos datos? ¿Para qué se utilizan? La opacidad en este punto genera desconfianza profunda.
Además, el equipamiento de autobuses con videovigilancia se justifica como medida de seguridad. Sin embargo, no se detalla la gestión de las imágenes, su almacenamiento ni los posibles usos adicionales, como identificación facial o cruce con bases de datos policiales. En una isla como Menorca, donde el transporte público es esencial para el 70% de los desplazamientos diarios, esto podría convertirse en una red de vigilancia masiva disfrazada de "progreso".
Los más vulnerables: barreras digitales y exclusión social
No todos los menorquines están preparados para esta "modernización". Personas mayores sin acceso a smartphones, familias de bajos recursos sin tarjetas de crédito y usuarios que valoran su anonimato se verán penalizados. La digitalización actúa como filtro excluyente: ¿qué pasa con quienes no puedan pagar por app o tarjeta? ¿Multas automáticas por "incumplimiento técnico"? Este sistema no resuelve problemas reales como la frecuencia insuficiente o las rutas deficientes; solo complica el acceso.
Impactos de la "modernización" en Menorca
| Aspecto | Beneficio declarado | Riesgo real |
|---|---|---|
| Pago ABT | Comodidad digital | Registro de movimientos y exclusión de no-digitales |
| Videovigilancia | Seguridad en vehículos | Invasión de privacidad sin control |
| Fondos europeos | Mejora de flota | Justificación para subidas de tarifas futuras |
| Acceso inclusivo | Eficiencia operativa | Barreras para vulnerables y aumento de desigualdad |
¿Estrategia política o servicio público?
Esta "modernización" llega en un momento clave: la concesión actual expira en 2026, y el Consell Insular busca posicionarse como institución innovadora para la nueva adjudicación. ¿Se prioriza la imagen política sobre las necesidades reales? En Menorca, donde el transporte público es vital para el turismo y la movilidad diaria, estas inversiones podrían traducirse en subidas de tarifas para cubrir "mantenimientos tecnológicos", sin mejoras tangibles en horarios o cobertura rural.
La falta de transparencia en el uso de datos y la ausencia de opciones no digitales refuerzan la sospecha: no es progreso inclusivo, sino control selectivo que beneficia a elites tecnológicas y administraciones ávidas de ingresos.
Exigencias urgentes para la isla
Para evitar que esta iniciativa se convierta en un nuevo impuesto encubierto, se requiere: transparencia total en la gestión de datos, opciones de pago anónimas y no digitales, auditorías independientes sobre el uso de fondos y participación ciudadana en la definición de prioridades. Menorca merece transporte eficiente, no un laboratorio de vigilancia.
Conclusión: vigilar para no ser vigilados
La "modernización" de los autobuses en Menorca representa un dilema clásico: progreso tecnológico al servicio de todos, o herramienta para el control y la recaudación? Sin escrutinio ciudadano, lo segundo es inevitable. La isla, con su esencia de libertad y proximidad, no puede permitirse ceder privacidad por promesas vacías.
Jose Pons Vidal
Periodista especializado en política internacional y análisis geopolítico.
